Señor alcalde: A mi de nada me sirve su pésame por el fallecimiento de mi marido. No me ha bajado los impuestos ni me ha ayudado en nada, los habitantes de las urbanizaciones también somos españoles, no vivimos en una república bananera, pero que tenga que pagar un taxi para subir cuando vengo de trabajar los sábados a partir de las diez de la noche, que no tenga autobús ni en agosto ni sábados por la tarde ni domingos o festivos todo el día es una vergüenza. Nosotros trabajamos en agosto, no tenemos la misma suerte que usted de tener vacaciones. Usted que es: alcalde solo de cara a la galería, que arregla solo lo del pueblo? Por favor, que hice campaña por usted con todas las madres del colegio, porque fue un buen concejal de juventud en Badia del Vallés. Como mi alcalde deja mucho que desear y no me ponga excusas, porque me las conozco todas. Intente arreglar este problema lo antes posible para agosto. Atte.: una contribuyente defraudada
